Es sabido que las gafas de sol son un elemento indispensable para cuidar de nuestra salud visual. Desde hace años, es cada vez mayor la concienciación que existe sobre el daño que causan los rayos ultravioleta en nuestra vista, por ello, usar gafas de sol es imprescindible.
Con tal de escoger unas gafas de sol que nos ofrezcan la mejor solución a nuestras necesidades, debemos conocer qué nos aportan las lentes solares y los diferentes tipos de tratamientos y filtros que podemos aplicarles.
Las lentes con filtro solar absorben el 100% de la radiación ultravioleta, que es la luz no visible dañina para el ojo, permitiéndonos cuidar de nuestra salud.
El sol puede dañar fácilmente los ojos y provocar grandes problemas a largo plazo por ello se recomienda usar gafas de sol siempre que nos expongamos a la luz solar, ya sea para pasear, conducir, hacer deporte… y en cualquier época del año, ya que, en invierno, aunque no haya tanta intensidad de luz, la radiación UV nos llega igual que en verano.
Las lentes solares básicas pueden ser todas de un mismo color o ser degradadas, lo que significa que la zona superior de la lente es más oscura y la zona inferior más clara.
Las lentes solares pueden ser todas de un mismo color o ser degradadas en la zona superior de la lente es más oscura y la zona inferior más clara.
Se trata de lentes de sol base a las que se les agrega una lámina que filtra los rayos de sol que caen en una determinada dirección. De esta manera, se eliminan los reflejos, mostrando los colores más naturales y vivos y obteniendo una mejor visibilidad.
Las gafas con cristales polarizados han sido siempre populares entre navegantes y pescadores pero en la actualidad son muchos más quienes se benefician de sus ventajas. Por ejemplo, se recomienda este tipo de lente para conducir porque absorbe los reflejos de manera que nos permite ver nítidamente la carretera y reduce el riesgo de accidentes.
Este tipo de gafas también aporta beneficios si eres amante de los deportes al aire libre como el esquí o la vela, ya que este tipo de actividades requieren la eliminación del resplandor para una seguridad y un rendimiento óptimos.
Es un tratamiento reflectante que se aplica a la cara externa de las lentes de sol, de manera que el exceso de luz visible se refleja y no traspasa la lente. El espejado nos permite recibir entre un 15-60% menos de luz.
Se recomienda usar gafas con cristales espejados en situaciones con mucha intensidad de luz, como las que se dan durante el verano, cuando la intensidad de luz es la máxima del año, o cuando vamos a la nieve, donde a la luz del sol se suma la luz reflejada en la nieve. También se recomienda utilizar este tipo de gafas de sol para hacer deporte al aire libre y en gafas curvadas, ya que nos evita reflejos de la luz que entra lateralmente.