Consejos para proteger la salud auditiva de los niños frente a los petardos

 

  • El límite de decibelios admitidos por la OMS para proteger nuestra salud auditiva es de 85 decibelios; sin embargo, la detonación de un petardo supera los 120 decibelios.
  • Joan Francesc Horvarth, responsable de audiología en Óptica & Audiología Universitaria, ofrece consejos para minimizar el impacto negativo de los petardos en la salud auditiva de los niños.

Los petardos y los fuegos artificiales que se lanzan estos días para celebrar la verbena de San Juan pueden ser muy perjudiciales para los oídos de los niños debido a su alta intensidad sonora, que puede superar fácilmente los 120 decibelios. La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que el nivel máximo de ruido que podemos escuchar sin riesgo para nuestra salud auditiva es de 85 decibelios. Sin embargo, cuando se trata de ruidos fuertes y repentinos, como los de los petardos, el límite de seguridad es más alto: 140 decibelios para adultos y 120 decibelios para niños. Superando estos niveles, el tiempo durante el cual estamos expuestos al ruido se convierte en un factor crucial para evitar daños en el oído.

Esta exposición puede causar daños temporales o permanentes en el oído, incluyendo pérdida auditiva, tinnitus (zumbido en los oídos) y dolor.

Para prevenir estos daños en los oídos de los más pequeños, Joan Francesc Horvarth, responsable de Audiología en Óptica & Audiología Universitaria asegura que “mantener alejados a los niños de la zona de la pirotecnia es el mayor consejo que se puede ofrecer para evitar que los oídos de los niños sufran con los petardos”. Además, Horvarth ofrece las siguientes recomendaciones:

Mantener una distancia prudencial: Asegurarse de que los niños se mantengan a una distancia segura y alejarse de donde se lanzan los petardos y fuegos artificiales. Cada metro que nos alejamos del ruido se disminuye 6dB la intensidad.

Usar protección auditiva: Utilizar tapones para los oídos o cascos protectores para los niños que cubran todo el pabellón auditivo y puedan atenuar hasta 30-35 dB, reduciendo significativamente el nivel de ruido que llega a sus oídos.

Ambientes interiores: Si es posible, mantener a los niños en interiores durante los espectáculos de fuegos artificiales. Las ventanas cerradas pueden atenuar el ruido.

Hablar sobre el ruido: Preparar a los niños y explicarles qué son los petardos y por qué hacen ruido. Esto puede ayudar a reducir el miedo y la ansiedad.

Desensibilización: Exponer a los niños a sonidos fuertes de manera gradual para que se acostumbren, pero siempre con precaución y en un ambiente controlado.

Horarios adecuados: Evitar exponer a petardos a los niños durante la noche o en momentos en que necesiten dormir, ya que el ruido puede interrumpir su descanso y aumentar el malestar.

Control constante: Supervisar a los niños durante las celebraciones para asegurarse de que no se acercan demasiado al lugar donde se encuentran los fuegos artificiales y puedan asustarse.

Tomar estas precauciones puede ayudar a minimizar el impacto negativo de los petardos en la salud auditiva de los niños y asegurar que disfrutan de la noche más larga del año de manera segura.

Sobre Óptica & Audiología Universitaria

 Fundada en 1992 con la apertura de un centro en la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) de Barcelona, Óptica &Audiología Universitaria cuenta con un equipo de más de 1.300 trabajadores y con 100 centros de óptica y audiología en España, incluyendo el canal de venta online. Actualmente la compañía forma parte del grupo multinacional alemán Fielmann, que a finales de 2020 adquirió la empresa.

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