La miopía magna, también conocida como miopía patológica o miopía degenerativa cuando se superan las 6 dioptrías, es una condición ocular que implica una mayor dificultad para ver objetos lejanos y que también puede llevar a complicaciones más serias que afectan la salud ocular general.
En este artículo, desde Óptica Universitaria te hablaremos con todo detalle sobre qué es la miopía magna, sus causas, síntomas, complicaciones y las opciones disponibles para su corrección y manejo.
¿Qué es la miopía magna?
La miopía magna es una forma severa de miopía en la que el alargamiento excesivo del globo ocular provoca una visión borrosa significativa a distancia. Se considera miopía magna cuando la graduación de la miopía supera las 6 dioptrías. A diferencia de la miopía común, la miopía magna no solo afecta la capacidad de enfocar objetos lejanos, sino que también está asociada con cambios degenerativos en la retina y otras estructuras del ojo. Esta condición puede progresar con el tiempo, aumentando el riesgo de desarrollar complicaciones graves que pueden afectar la visión permanentemente.
Causas y factores de riesgo
Factores genéticos
La miopía magna tiene una fuerte componente genética. Los niños con padres miopes, especialmente aquellos con miopía magna, tienen una mayor probabilidad de desarrollar esta condición. Los estudios han identificado varios genes asociados con el desarrollo de la miopía, lo que sugiere que la herencia juega un papel significativo en su progresión.
Factores ambientales y hábitos de vida
Además de la genética, los factores ambientales y los hábitos de vida también contribuyen al desarrollo de la miopía magna. Pasar mucho tiempo realizando actividades de visión cercana, como leer, usar dispositivos electrónicos y trabajar con ordenadores, puede aumentar el riesgo de desarrollar miopía. La falta de exposición a la luz natural y el tiempo limitado al aire libre también se han relacionado con una mayor incidencia de miopía en niños y adolescentes.
Desarrollo y progresión de la miopía magna
La miopía generalmente comienza en la infancia y progresa durante los años de crecimiento. A medida que el ojo se alarga, la miopía se agrava, y si no se controla, puede continuar empeorando hasta la edad adulta. La progresión puede llevar a un adelgazamiento de la retina y a otros cambios degenerativos que aumentan el riesgo de complicaciones severas.
Síntomas y diagnóstico de la miopía magna
La miopía magna puede manifestarse con diversos síntomas que pueden afectar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen. Identificar estos síntomas y obtener un diagnóstico preciso es crucial para manejar adecuadamente esta condición.
Síntomas comunes de la miopía magna incluyen:
- Visión borrosa a distancia.
- Dificultad para ver en condiciones de poca luz.
- Síntomas asociados a patología retiniana como moscas volantes o flashes de luz.
Técnicas y herramientas de diagnóstico
Para diagnosticar la miopía magna, los profesionales de la salud ocular utilizamos varias técnicas y herramientas avanzadas:
- Examen de agudeza visual: Este es el primer paso para evaluar la claridad de la visión. Se utilizan optotipos de letras o números para determinar la capacidad del paciente para ver a diferentes distancias.
- Refracción: Mediante el uso de un foróptero, el oftalmólogo u óptico-optometrista mide la graduación necesaria para corregir la visión del paciente. Este proceso determina el grado de miopía.
- Oftalmoscopía: Esta técnica permite al oftalmólogo examinar el fondo del ojo, incluyendo la retina y el nervio óptico, para detectar cualquier signo de daño o cambios degenerativos.
- Tomografía de coherencia óptica (OCT): La OCT es una técnica de imagen avanzada que proporciona imágenes detalladas de las capas de la retina. Es útil para detectar adelgazamientos y otras anomalías en la retina.
- Biometría ocular: Esta herramienta se utiliza para medir la longitud axial del ojo y detectar cualquier alargamiento excesivo, característico de la miopía magna.
Complicaciones asociadas a la miopía magna
La miopía magna no únicamente afecta la visión, sino que también puede llevar a complicaciones graves que ponen en riesgo la salud ocular general.
Desprendimiento de retina
Una de las complicaciones más serias de la miopía magna es el desprendimiento de retina. El alargamiento excesivo del globo ocular puede causar tensiones y desgarros en la retina, lo que puede llevar a su desprendimiento. Esta condición es una emergencia médica y requiere intervención inmediata para evitar la pérdida permanente de la visión.
Glaucoma y cataratas
Las personas con miopía magna tienen un mayor riesgo de desarrollar glaucoma, una condición que daña el nervio óptico debido al aumento de la presión intraocular. Además, también tienen una mayor probabilidad de desarrollar cataratas a una edad más temprana, lo que puede afectar significativamente la calidad de la visión.
Degeneración macular miópica
La degeneración macular miópica es otra complicación asociada con la miopía magna. Esta condición ocurre cuando la mácula, la parte central de la retina responsable de la visión central detallada, se deteriora. Esto puede resultar en una pérdida significativa de la visión central, dificultando actividades cotidianas como leer y reconocer caras.
Corrección óptica: gafas y lentes de contacto
La corrección óptica es una de las formas más comunes y efectivas para manejar la miopía magna. Aunque no puede revertir la condición, puede mejorar significativamente la calidad de vida al proporcionar una visión más clara.
- Gafas: Las gafas son una opción popular para corregir la miopía. Las tecnologías modernas permiten fabricar cristales más delgados y ligeros que proporcionan la corrección necesaria sin comprometer la estética y la comodidad. Las gafas también pueden incluir tratamientos especiales, como recubrimientos antirreflectantes y filtros de luz azul, que mejoran la comodidad visual.
- Lentes de contacto: Las lentes de contacto son otra opción eficaz para corregir la miopía magna. Ofrecen una visión más natural y un campo visual más amplio en comparación con las gafas. Existen diferentes tipos de lentes de contacto, incluyendo lentes blandas y rígidas permeables al gas, que pueden adaptarse a las necesidades específicas de cada paciente. Las lentes de contacto también pueden ser personalizadas para corregir otras condiciones visuales, como el astigmatismo.
- Lentes de contacto tóricas: Para aquellos con miopía magna combinada con astigmatismo, las lentes de contacto tóricas son una excelente opción. Estas lentes están diseñadas para corregir ambas condiciones simultáneamente, proporcionando una visión clara y nítida.
Tanto para la corrección con gafas como con lentes de contacto, existen diseños específicos para control de miopía. Estos diseños se utilizan en niños y ayudan a ralentizar la progresión de la miopía para no llegar a graduaciones tan elevadas y disminuir la probabilidad de complicaciones oculares más graves.
Prevención y manejo de la miopía magna
La prevención y el manejo de la miopía magna son cruciales para minimizar su progresión y las complicaciones asociadas.
- Revisiones oculares regulares: Realizar revisiones oculares periódicas es fundamental para detectar y tratar la miopía magna a tiempo. Los exámenes regulares permiten a los profesionales de la salud ocular monitorear la progresión de la miopía y ajustar las prescripciones según sea necesario.
- Control ambiental y hábitos de vida: Fomentar el tiempo al aire libre y limitar las actividades de visión cercana pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar miopía magna. Asegurarse de que los niños pasen suficiente tiempo al aire libre y establecer descansos regulares durante el trabajo en computadora o la lectura puede ser beneficioso.
- Tratamientos farmacológicos: En algunos casos, se pueden utilizar gotas oftálmicas con atropina de baja dosis para ralentizar la progresión de la miopía en niños y adolescentes. Este tratamiento debe ser administrado bajo la supervisión de un oftalmólogo.
- Ortoqueratología: La ortoqueratología es un tratamiento no quirúrgico que utiliza lentes de contacto especiales para moldear la córnea durante la noche. Esto puede proporcionar una visión clara durante el día sin la necesidad de usar gafas o lentes de contacto. Es especialmente útil para controlar la progresión de la miopía en niños.
- Lentes oftálmicas o lentes de contacto con diseño específico para control de la miopía.
- Cirugía refractiva: En casos severos, la cirugía refractiva puede ser una opción para corregir la miopía magna. Procedimientos como LASIK o PRK pueden modificar la forma de la córnea para reducir la dependencia de gafas o lentes de contacto. Sin embargo, no todos los pacientes son candidatos ideales para la cirugía, y es importante evaluar los riesgos y beneficios con un oftalmólogo. Con la cirugía refractiva corregimos la miopía al modificar la curvatura de la córnea o mediante la implantación de una lente intraocular, pero se mantiene el tamaño del ojo y el debilitamiento de las estructuras oculares.
La miopía magna es una condición ocular que requiere una atención y un manejo cuidadoso para minimizar su impacto en la calidad de vida. Comprender las causas, los síntomas y las complicaciones asociadas es fundamental para tomar decisiones informadas sobre el tratamiento y la prevención.
En Óptica Universitaria, estamos comprometidos a ofrecer soluciones ópticas avanzadas y asesoramiento profesional para ayudar a nuestros pacientes a manejar esta condición de manera efectiva. No dudes en visitarnos para una evaluación ocular completa y conocer más sobre las opciones disponibles para el tratamiento de la miopía magna.
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